MADRID, 12 Jul. (EUROPA PRESS) –
El Indicador de Confianza Empresarial Armonizado (ICEA), cuya publicación corresponde al Instituto Nacional de Estadística (INE), subió un 0,5% en el tercer trimestre de este año respecto al trimestre anterior gracias a la mejora de la percepción sobre la situación actual.
De acuerdo con los datos de Estadística, de los cinco sectores económicos analizados en este trimestre, el que experimentó el mayor avance de la confianza fue el de construcción, con un aumento del 2,6%, seguido del comercio (+1,4%) y de la industria y el transporte y la hostelería (+0,1% en ambos casos). Por el contrario, la confianza disminuyó un 0,2% en los otros servicios.
Con este repunte de la confianza en el tercer trimestre, este indicador encadena dos trimestres de tasas positivas después de que registrara entre enero y marzo un descenso del 1,3%, el primero en casi tres años.
Los datos del INE correspondientes al tercer trimestre apuntan a una mejora de la percepción sobre la situación actual y a un empeoramiento de las expectativas, ya que los empresarios pesimistas sobre cómo marchará su negocio han superado a los optimistas.
En concreto, en el tercer trimestre del año el balance de expectativas (diferencia entre las opiniones de los empresarios optimistas y los pesimistas), se situó en -1,1 puntos, frente al saldo positivo de 1,9 puntos del trimestre anterior.
Esto se debe a que el porcentaje de establecimientos empresariales que piensan que la marcha de su negocio será desfavorable entre julio y septiembre de este año se ha situado en el 21,4%, cifra superior a la del trimestre anterior (18,2%).
En cambio, en el tercer trimestre, aumentó ligeramente el optimismo de los empresarios respecto al futuro inmediato (desde el 20,1% del segundo trimestre al 20,3% en el tercero), al tiempo que disminuyeron, desde el 61,7% al 58,3%, los que opinan que su negocio marchará de manera normal.
MEJORA LA PERCEPCIÓN SOBRE LA SITUACIÓN ACTUAL.
Por su parte, el balance de situación (diferencia entre respuestas favorables y desfavorables respecto al trimestre finalizado) mejoró cinco puntos y alcanzó los -1,2 puntos, frente a los -6,2 puntos del trimestre anterior.
Esta mejora de la percepción sobre la situación actual es resultado del aumento de establecimientos empresariales que piensan que su negocio evolucionó de manera favorable en los tres últimos meses y del descenso de los que opinan que se comportó de manera desfavorable.
Así, en cuanto al trimestre ya finalizado (segundo trimestre de este año), el ICEA muestra que el 19,6% de los establecimientos empresariales tienen una opinión favorable sobre cómo ha funcionado su negocio en esos tres meses, frente al 20,8% de establecimientos que han apreciado una evolución desfavorable en este periodo y al 59,6% que hablan de normalidad.
El ICEA, que tiene una periodicidad trimestral y es comparable a nivel europeo, es la primera encuesta de opinión que realiza el organismo estadístico y se elabora a partir de una muestra representativa de establecimientos empresariales.
Durante el tercer trimestre, la confianza empresarial sube en 11 comunidades autónomas, en cuatro sectores de actividad (construcción, comercio, industria y transporte y hostelería) y en tres de los cinco tamaños de establecimientos analizados.
LOS MAYORES REPUNTES EN BALEARES Y CANTABRIA.
En cuanto al tamaño de los establecimientos, la confianza mejoró un 1% en los de 10 a 49 asalariados; un 0,7% en los de menos de 10 asalariados, y un 0,3% en los de más de 1.000 asalariados. Por el contrario, la confianza retrocedió en las empresas de 50 a 199 asalariados (-0,3%) y en las de 200 a 999 asalariados (-0,2%).
Por comunidades, la confianza empresarial progresó en el tercer trimestre en once de ellas y bajó en siete.
Los mayores repuntes se los anotaron Baleares y Cantabria, con avances del 8,5% y del 4,2%, respectivamente, mientras que los mayores recortes se dieron en Aragón (-4%) y Murcia (-3,1%).
Para la elaboración de este indicador se toma como referencia metodológica la OCDE, el Ifo alemán y, sobre todo, el Tankan japonés, que elabora el Banco Central del país nipón.