En la operación se han intervenido casi 300 kilos de hachís y 4.000 comprimidos de clonazepam
SANTANDER, 20 May. (EUROPA PRESS) –
La Guardia Civil ha desarticulado una organización compuesta por presos del centro penitenciario El Dueso de la localidad de Santoña (Cantabria), dedicada a la introducción y distribución de droga en el citado centro. En la operación también se han desarticulado otras cuatro organizaciones dedicadas al tráfico de hachís y otras sustancias, de las cuales se suministraban la red de internos.
La operación, denominada ‘Overbooking’, se ha desarrollado durante año y medio en Cantabria, Vizcaya y Guipúzcoa, y se ha saldado con la detención de 32 personas (17 españoles -algunos cántabros-, 14 marroquíes y 1 argentino), de los que treinta son hombres y dos, mujeres. Algunos cuentan con antecedentes penales, de distinto tipo, y otros no.
Cinco de los arrestados son presos de El Dueso y un total de 15 se encuentran en la cárcel. No obstante, la investigación continúa abierta y no se descartan nuevas detenciones.
Asimismo, se han practicado 28 registros en domicilios, garajes, trasteros y un local de hostelería, donde se ha intervenido cerca de 300 kilos de hachís, más de 4.000 pastillas de clonazepam, casi 2.500 gramos de cogollos de marihuana, plantaciones indoor de marihuana, más de 700 gramos de speed, 100 gramos de cocaína, sustancia de corte, pequeñas cantidades de otras sustancias estupefacientes, más de 47.000 euros en metálico, 7 vehículos, 61 teléfonos móviles, tarjetas de telefonía, balanzas, ordenadores y cuatro placas de matrícula extranjeras, de Alemania y Francia.
También se ha intervenido una pistola y 2 revólveres, un rifle con silenciador, así como 287 cartuchos de diferentes calibres. De hecho, dos de los detenidos lo están por tráfico ilegal de armas.
La operación, dirigida por el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 2 de Santoña y el fiscal antidroga del Tribunal Superior de Justicia de Cantabria, ha sido dada a conocer este viernes en rueda de prensa por el delegado del Gobierno en Cantabria, Samuel Ruiz, y mandos de la Guardia Civil, acompañados por el director de El Dueso, Carlos Fonfría.
Se inició a finales del 2014 cuando la dirección del centro penitenciario informó de que un recluso al regreso de un permiso tuvo que ser evacuado al hospital por tener dentro de su organismo 80 bolas de hachís y haberse roto uno de los envoltorios.
A raíz de este incidente, los agentes pudieron constatar que detrás de estos hechos estaba un interno que lideraba la red, el cual aprovechaba los permisos penitenciarios de otros internos para introducir la droga oculta en el interior del organismo y así evadir los controles de los funcionarios de prisiones.
Asimismo, el cabecilla impartía instrucciones a su compañera sentimental para comprar la droga y facilitársela a los internos que se encontraban de permiso. Posteriormente distribuía la droga y si llegaba el caso, extorsionaba a otros reclusos para que realizaran pagos o para que se comprometieran a introducir más droga a la vuelta de sus futuros permisos
Fruto de esta investigación, la Guardia Civil constató diferentes puntos venta de droga en Cantabria y Vizcaya. Igualmente, los agentes detectaron que para blanquear el dinero procedente de la venta de la droga la destinataria era la compañera sentimental del cabecilla la cual recibía ingresos de presos o familiares, siempre como pago de las deudas contraídas en el interior de la cárcel o por la compra de la droga.
Por tal motivo, se procedió al bloqueo de 6 cuentas bancarias, así como a la intervención de 22 vacas de raza pirenaica y un toro limousin en una explotación ganadera de la que es titular la citada mujer, al haberse averiguado que estos animales fueron comprados con dinero procedente de pagos de droga de la citada prisión.
OTRAS CUATRO ORGANIZACIONES
A raíz de esta investigación, la Benemérita procedió a la desarticulación de otras cuatro organizaciones dedicadas al tráfico de hachís, marihuana y speed. Una de ellas era responsable de introducir importantes cantidades de hachís desde Marruecos hasta el Norte de España.
En este marco, se intervino en un garaje de Lejona, en Vizcaya, un vehículo con un doble fondo, donde se localizaron 110 kilos de hachís. En posteriores registros domiciliarios se hallaron más de 95 kilos de esta misma sustancia.
El resto de organizaciones operaban principalmente en Cantabria y también en otras provincias limítrofes.
4.000 PASTILLAS DE CLONAZEPAM CON DESTINO A MARRUECOS
Fruto de las investigaciones realizadas, los efectivos de la Guardia Civil han constatado que las más de 4.000 pastillas de clonazepam -medicamento del grupo de la benzoadiacepinas con un potente efecto sedante y ansiolítico- intervenidas en varios de los registros fueron localizadas ya empaquetadas y encintadas, y tendía como destino Marruecos para ser mezcladas con hachís y formar el denominado ‘karkubi’, una peligrosa combinación que puede llegar a provocar alucinaciones y conductas psicopáticas.
La operación ha sido desarrollada por el equipo de Delincuencia Organizada y Antidroga (EDOA) de la Policía Judicial de Cantabria y de Vizcaya, la Unidad Central Operativa (UCO) y el Grupo de Acción Rápida (GAR) de la Benemérita. Ha contado con la colaboración de los funcionarios de El Dueso.
El delegado del Gobierno en Cantabria ha felicitado a las unidades, cuerpos y agentes que han participado en esta operación, que ha sido larga, complicada y difícil, en palabras del jefe interino de la 13 Zona de la Guardia Civil. Por su parte, el director de El Dueso ha recordado que la droga en los centros penitenciarios constituye “una lacra”, de ahí que la labor de estos centros sea “vital” para combatir y evitar estas situaciones.